Espelunca.- Oye, Antronia, tú que eres experta en esto, dime ¿crees que evolucionan las especies?
Antronia.- Claro que sí ¿ahora te enteras?
Espe.- No, si lo sé. Pero lo que me extraña es lo que parece dar a entender el enunciado típico de la teoría biológica (que yo acepto, claro): la evolución de las especies.
Antronia.- Así es. La vida apareció en la tierra en forma muy simple y se ha ido volviendo más compleja mediante dos factores principales, la mutación genética y la selección ambiental.
Espe.- Pero, bueno, pensándolo bien, esa teoría no puede significar literalmente que son las especies las que evolucionan, ¿no?
Antronia.- ¿Por qué no?
Espe.- Por ejemplo, no fue la especie Mamut la que evolucionó a Elefante, o cierta especie de reptil la que se convirtió en la especie de primer Ave, o el homo erectus el que se convirtió en homo sapiens… Lo que pasó, creo yo, es que nació, de madre Mamut, un individuo que no tenía las mismas características que su madre, lo que le mereció otro nombre, de otra especie.
Antronia.- Claro, ¿y qué quieres decir con eso?
Espe.- Los mamuts desaparecieron luego, pero la especie Mamut es la misma de siempre, no se convirtió en la especie Elefante. Si ahora, por clonación o como fuese, volviese a haber mamuts, pertenecerían a la misma especie. Date cuenta de que, si fuese la especie misma (Mamut, o Reptil, u Homo erectus) la que hubiese evolucionado, no habría que cambiarle el nombre, sería ella misma...
Antronia.- Bueno, sí, un mamut es un mamut, y un elefante es un elefante.
Espe.- Esto es lo mismo que decir que cuando un objeto pequeño se hace grande o un objeto frío se calienta, no son las especies Pequeño y Frío las que evolucionan a Grande o Caliente. ¿Estás de acuerdo?
Antronia.- Es raro, pero… sí, no tengo inconveniente en aceptar eso. ¿Y qué?
Espe.- Un profe mío decía que la teoría de la evolución iba directamente contra la teoría de Aristóteles, de que las especies son eternas. Pero yo no lo veo claro. Creo que lo que dice la teoría de la historia de la vida es que los elefantes no aparecieron hasta hace unos millones de años, debido a ciertas mutaciones genéticas, que determinan lo que es cada individuo, y a qué especie pertenece.
Antronia.- Eso es lo que dice la teoría, ni más ni menos.
Espe.- Pero esto no significa que sean las especies mismas las que cambien, sólo significa que en ciertos tiempos existen cosas de una especie y en otros tiempos, de otra. Si quisieran decir que Aristóteles se equivocaba al pensar que había habido elefantes desde siempre, estoy de acuerdo. Eso es una teoría científica. Pero algunos quieren sacar de aquí la teoría filosófica de que las Formas o Especies intemporales no existen, porque todo nace.
Antronia.- Bueno, si así te quedas más tranquila…
Espe.- Pero… si no son las especies las que evolucionan ¿qué es lo que cambia?
Antronia.- Los individuos.
Espe.- Tampoco, creo yo. Los individuos son especies en pequeño. Yo creo que es la materia, o la energía universal, de la que hablan los científicos, la que cambia, pasando de una forma a otra. No las propias formas. Por ejemplo, si pasa de haber dos a tres cosas, es la materia, no el dos o el tres, la que cambia. Entonces, digo yo, en cierto modo se puede decir que todo lo que está pasando estaba preescrito, y que lo único que hay de nuevo es que aparece.
Antronia.- ¿Cómo dices?
Espe.- Lo que quiero decir es que, el cambio de la materia, se debe a que “obedece”, como soléis decir los científicos, a las leyes de la naturaleza. Si las leyes del universo fuesen distintas, habría otros seres, o ninguno.
Antronia.- Desde luego, con muy poco que cambiasen las constantes universales.
Espe.- Así que hay las cosas que hay porque la materia o energía está regida por las leyes que tiene. Luego, en cierto modo, nada surge de la nada, nada es nuevo en sentido absoluto, sino que todo está predeterminado, como nos pasa a nosotros con nuestros genes.
Antronia.- Vale.
Espe.- Pero a veces utilizáis expresiones como que las cosas surgen por azar, o del caos… como si saliesen de la nada. Y esto me crea mucha confusión, y creo que a la gente y a vosotros mismos, también.
Antronia.- Puede ser.
Espe.- ¿Entonces crees que la teoría de la evolución de la materia entra en conflicto con la teoría de la universalidad de las especies o formas?
Antronia.- Puede que no, tendré que pensarlo más detenidamente.
Espe.- Otro día me gustaría que me dijeses que piensas de lo siguiente: ¿crees que entra en conflicto, la teoría de la evolución, con su azar de mutaciones y su selección, con la idea de que el mundo tiene algún propósito inteligente?
Antronia.- Muy bien, otro día. Pero todas esas cuestiones que tú planteas, Espe, yo, como científica, no me las suelo plantear, así que no esperes que las tenga muy claras.
¿Qué opinas tú?